Un sistema GACP utiliza ánodos que generan una corriente natural para inhibir la corrosión del acero en el concreto.
Los GSC SuperAnodes están específicamente diseñados para inhibir la corrosión de las estructuras reforzadas de concreto usando GACP. Se incrustan comúnmente los ánodos dentro del concreto o mortero de reparación y se conecta eléctricamente al refuerzo usando ataduras galvanizadas. Ya que el zinc es menos noble que el acero, significa que el ánodo tiene un potencial mas electronegativo que le acero del refuerzo. Esto hace al zinc el ánodo, y al refuerzo de acero el cátodo. La corriente fluirá del ánodo al catodo inhibiendo la corrosión de la barra de refuerzo, de ese modo evitando el agrietamiento y desprendimiento del concreto incluso en presencia de sales de cloruro dentro del hormigón.
El ánodo de zinc genera un campo eléctrico mientras se sumerge en el electrolito permitiendo que se descargue una corriente protectora del acero dentro del área de influencia del ánodo.
Así, mediante la distribución de una cantidad relativamente pequeña de ánodos por el interior de la estructura, se consigue la completa protección de la misma, reduciéndose los costes de instalación, con menor requerimiento de personal.
Si se desea, la instalación puede ser monitorizada fácilmente por el personal in situ.
Los GSC SuperAnodes están fabricados en zinc laminados con una pureza del 99.99% cubiertos por dos capas de una pasta activadora del ánodo de zinc. Cada ánodo esta sellado al vacio en una bolsa de platico para evitar contaminación durante el embarque y el almacenamiento y transporte. Antes de la aplicación, se quita el envoltorio, y está listo para la Ainstalación.
Se suministran los GSC SuperAnodes en los siguientes tamaños
Las densidades de corriente requeridas para un sistema típico de PC para nuevas estructuras reforzadas estarán entre 0.2 y 2 mA/m2, si bien para las estructuras reforzadas mas antiguas, donde el refuerzo no es pasivo, el requerimiento de la densidad de corriente de PC estará entre 2 y 20mA/m2 (EN ISO 12696).
1. El acero en el concreto, estando en un estado pasivo, requerirá densidades de corriente muy bajas para permanecer en este estado, y si se aplican ánodos galvánicos, los cuales por su naturaleza tienen una salida de corriente baja, fácilmente se logrará el periodo requerido de vida del diseño.
2. Cuando el acero está en un estudio activo, el requerimiento de densidad de corriente inicial será relativamente alto (aprox. 20mA/m2), la densidad de corriente se reducirá gradualmente a niveles inferiores (4-5 mA/m2) cuando el acero se vaya repasivando, lo cual se logra en un periodo de entre 6 a 12 meses, dependiendo de la naturaleza agresiva del medio que rodea las estructuras de acero y del contenido en cloruros del concreto. Lo interesante de este tipo de sistemas, es que puede verse, de esta forma, que la salida de corriente de estos ánodos se adapta de forma natural a los nuevos requerimientos de necesidad de protección, lo cual indirectamente incrementa su periodo de vida cuando el requerimiento de corriente se reduce en el transcurso del tiempo. Una ventaja mayor es que estos tipos de sistemas están exentos de mantenimiento, pero si se requiere, pueden monitorizarse fácilmente.
Nuestros ánodos estándar tienen una vida de servicio de diseño de 10 años para el GSC 10/10 y GSC 30/10 y 20 años para el GSC 10/20 y 30/20.
El periodo de vida de los ánodos es determinado por varios factores que pueden alterarse con el transcurso del tiempo. Y, en general, se basa en presunciones estándar que raramente se corresponden con la situación actual de la vida real.
Deberá considerarse que el proceso de corrosión del acero en el concreto no se iniciará inmediatamente una vez que los ánodos hayan alcanzado su “fin de vida” y ya no puedan descargar la corriente protectora porque como el acero en el concreto ha sido repasivado por el sistema de PC consumido, transcurrirá un periodo de tiempo antes de que la corrosión se inicie debido al ingreso progresivo de especies agresivas en el concreto.
A solicitud, pueden modificarse y diseñarse los ánodos para lograr un periodo de vida de 40 años.
El tamaño y disposición de los ánodos depende completamente de parámetros ambientales locales, aunque puedan tenerse en consideración todos los posibles efectos, Por lo tanto, los cálculos del periodo de vida permanecen como indicadores de “mejor estimado”.
En estructuras reforzadas existentes, la PC es una parte integral del concepto de rehabilitación y está destinada en reducir la tasa de corrosión del refuerzo de acero desde valores significativos a insignificantes.
Estructuras nuevas que se encuentren en ambientes agresivos pueden dotarse con un sistema PC usando una pequeña cantidad de corriente continua de protección (DC) que se aplica inicialmente en su vida de servicio.
Este tipo de protección se llama prevención catódica EN (ISO) 12696 y puede usarse para estructura nuevas de concreto reforzado, o estructuras existentes en las cuales no se indica todavía el proceso de corrosión, pero dicha corrosión ocurrirá mas probablemente gracias al ingreso progresivo de electrolitos agresivos con el transcurso del tiempo.
Para construcciones nuevas, pueden aplicarse una prevención catódica de una manera fácil y sencilla ya que la demanda de corriente será relativamente baja y, por lo tanto, será un solución de costes bajos para alcanzar el periodo de vida del diseño de la estructura